Italiano, francés, americano, inglés… Esta lista puede parecer una enumeración de nacionalidades, pero lo cierto es que esos adjetivos también designan a los diferentes tipos de cuello de camisa vigentes a día de hoy. Cada uno con sus peculiaridades, historia y combinación ideal con corbata, pajarita u otro accesorio. Elegir el adecuado para cada ocasión hará marcar la diferencia al hombre o la mujer que vista la camisa, una prenda histórica que bien merece un análisis profundo. Felizmente, a continuación descubrirás todos los secretos de la camisa y de sus cuellos.
Los orígenes de la camisa
Hoy en día, la camisa es sinónimo de elegancia, pero en sus orígenes su uso se asociaba con un significado completamente diferente. Su predecesor en la Edad Antigua, alrededor del año 1.500 a.C., fue el kalasiri, una prenda típica de los hombres y mujeres egipcios que se asemeja a una túnica de lino que habitualmente era la prenda interior de la vestimenta.
Las diferentes civilizaciones que gobernaron el mundo fueron aportando su granito de arena a la confección de la camisa actual. En primer lugar, los romanos adaptaron el kalasiri creando las túnicas manicatas, que ya incluían mangas y seguían sirviendo como prenda interior, según informa la ‘Revista Mujer’.
Sin embargo, no es hasta la Edad Media (entre los siglos V y XV) cuando la camisa se expande globalmente. En esta época la moda evoluciona y aparecen las primeras camisas con algún botón mientras persiste su uso para proteger la piel del resto de prendas. Asimismo, comienzan a producirse camisas de diferentes tejidos: el algodón ya compite con el lino. Eso sí, el blanco continúa como el color único de la camisa.
El ‘salto’ de la camisa en siglo XVIII
El Renacimiento (siglos XV y XVI) supuso un punto y seguido al crecimiento de popularidad de la camisa. Todos los nobles tenían varias camisas blancas en sus armarios gracias al aumento de la producción: se desarrollaron nuevas técnicas de costura.
Con la llegada del siglo XVIII, las camisas blancas ya son símbolo de nobleza, por lo que nace el oficio del sastre. Las camisas de los más adinerados tenían que estar impecables y adaptarse a su cuerpo a la perfección. Asimismo, al algodón y al lino se suma la seda como material de fabricación.
Esta distinción de las clases nobles trae consigo un cambio radical en la utilización de la camisa. La prenda deja de servir como ropa interior y forma parte de la vestimenta principal de los hombres. De hecho, a partir de 1850 son ya populares las camisas abotonadas de diferentes colores.
Siglo XX: producción en masa y aparición de múltiples tipos de camisas
La democracia, la reducción de las diferencias sociales y económicas y la progresiva igualdad de género son fundamentales en la evolución de las camisas. No solo aumenta el ritmo de producción, sino que surgen múltiples tipos de camisas: de colores variados, de cuadrados, a rayas, estampadas… y también con tipos de cuello diferentes.
Las mujeres ya las visten a menudo y empieza a darse un uso menos formal, aunque todavía persiste su asociación al mundo laboral o las fiestas en las que prima la elegancia.
La camisa, pieza clave de la moda en el siglo XXI
Camisas formales, camisas casual, camisas de verano, camisas estampadas… En cada colección de grandes y pequeños diseñadores las camisas juegan un papel fundamental en el siglo XXI.
En la actualidad, la camisa es una prenda básica con múltiples variantes. La principal, los diferentes tipos de cuello de camisa que existen. Del cuello mao al cuello italiano. A continuación puedes conocer en qué consiste cada uno.
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Los tipos de cuello de camisa para hombre y mujer
Cuello Mao
Probablemente, cuando lees o escuchas algo sobre el cuello Mao de la camisa todo te suena a chino. Efectivamente, su origen es chino. De hecho, su nombre original es cuello Mandarín.
El cuello Mao, en el que destacan sus extremos redondeados, es originario de China, donde antiguamente era muy común y todavía hoy en día sigue vigente en los trajes tipo Mao. En Europa se puso de moda en las décadas de 1960 y 1970 gracias a la figura de Mao Zedong, exdirigente de la República Popular China. Este llevaba siempre una camisa o camiseta de cuello Mao, una tendencia que conquistó las pasarelas de Londres y París.
El cuello Mao destaca por sus terminaciones redondeadas y se asocia con camisas de estilo casual. Permite múltiples combinaciones y es uno de los cuellos de camisa más cómodos.
Cuello Italiano
Los italianos adaptaron el modelo inglés a su forma de vestir, habitualmente más elegante y estilizada. El resultado es un cuello de camisa estrecho, con las puntas cortas y con amplitud. Esto permite lucir la corbata mostrando el nudo al 100%.
El cuello Italiano de camisa es hoy en día el más popular en el mundo de la moda. Es cómodo, elegante y no implica necesariamente llevar un complemento como la corbata.
Cuello Francés o Cutaway Collar
El cuello perfecto para una vestimenta formal. Se trata de un cuello de camisa ancho con las puntas abiertas que encaja a la perfección con corbatas anchas en el caso de los hombres o cualquier tipo de jersey o chaqueta en el de las mujeres.
También recibe el nombre de Cutaway Collar o Windsor. Esta última denominación hace referencia al rey Eduardo VIII de Inglaterra, conocido más tarde como duque de Windsor. Eduardo VIII hizo populares los nudos de corbata anchos hasta el punto de convertir en conocido mundialmente uno de sus nudos: el nudo Windsor. Lógicamente, un nudo ancho requiere de un cuello de camisa ancho, por lo que la misma denominación se utilizó para la camisa de cuello francés.
Cuello Americano
Como bien dice su denominación, este tipo de cuello nació en América. La empresa de moda Brooks Brothers, fundada en el año 1818 en Manhattan (Nueva York) creó las primeras camisas con cuello americano, un estilo que se mantiene vigente en nuestros días.
Su característica más importante son los botones que tiene en los extremos. Estos permiten una mejor sujección de la camisa y dan a la prenda un estilo más informal. De hecho, es habitual que este tipo de camisas no se combinen con corbatas.
Cuello Inglés
No existe cuello de camisa más tradicional que el inglés. Los sastres ingleses lo inventaron y su popularidad permanece intacta. Se trata de un cuello con puntas alargadas, más alto que el italiano. Asimismo, es un modelo de cuello estrecho para el que son ideales corbatas finas. Utilizar una corbata ancha con el cuello inglés puede suponer un problema a la hora de hacer el nudo.
Pin Collar
Quizás no hayas oído hablar o no hayas visto nunca este tipo de cuello de camisa. Sin embargo, fue muy popular a principios del siglo XX en Estados Unidos, concretamente en las décadas de los años 20 y los años 30.
Lo que llama la atención es la utilización de un pin o un imperdible que une las dos puntas de la camisa. Esto evita que los extremos se separen en exceso, algo que ocurre frecuentemente cuando la camisa no está bien planchada. Además, garantiza que la corbata quede perfectamente estirada y estilizada.
Cuello Ópera
Los picos de este cuello son mucho más cortos de los que poseen los otros modelos. Por ello, es un tipo de cuello ideal para pajaritas y corbatas que formen parte de vestimentas de ceremonias, galas u otros eventos de suma importancia y caché.
Cuello Club
Este cuello de camisa es poco común. Destaca por tener unas puntas redondeadas que hacen destacar el nudo de la corbata. Su origen está en el Eton College, colegio e internado de las clases británicas más importantes. Instauraron este tipo de cuello en sus camisas en el siglo XIX, perdurando hasta la actualidad. Posteriormente se exportó a la moda común.
Cuello con trabilla o Tab Collar
Cuello innovador con una trabilla que une la dos puntas y hace que el nudo de la corbata destaque. Toda la corbata se realza y, por tanto, llama mucho la atención.
Cómo limpiar cuellos de camisa
Para asegurarnos de que las manchas del cuello de una camisa desaparecen, es fundamental tratar la camisa a mano antes de introducirla en la lavadora. El primer paso consiste en extender por encima del cuello de la camisa un producto quitamanchas eficaz. Para ello, se puede usar un cepillo de dientes que extenderá el producto de limpieza por cada rincón del cuello de la camisa.
Se recomienda echar el producto por los dos lados del cuello. Una vez realizado este paso se debe dejar la camisa en reposo durante cinco minutos. Así el quitamanchas hará efecto. Algunos de los productos más recomendables del mercado para esta práctica son KH-7 Quitagrasas o Cebralín.
Esta zona de la camisa es propensa a coger marcas y a ennegrecerse por su uso diario, más allá de otras manchas. Con esta técnica previa a la introducción en lavadora obtendremos el resultado que deseamos. Por otro lado, esta práctica también funciona con los puños de las camisas.
Cómo blanquear cuellos de camisas blancas
El blanco es el color más sensible en lo que se refiere a las manchas. En el ámbito de las camisas de este color, cualquier parte es susceptible de verse perjudicada por la suciedad, pero especialmente el cuello de la camisa.
Este tiende a ennegrecerse con el paso del tiempo, así como a coger un color amarillento por el sudor. ¿Qué se puede hacer ante estas situaciones? Presentamos los métodos más eficaces para blanquear el cuello de una camisa blanca:
- Usa bicarbonato de sodio. Esta técnica consiste en echar cinco cucharadas de bicarbonato de sodio en un vaso de agua, remover, y aplicar la mezcla sobre el cuello. Después se enjuaga la prenda y se introduce en la lavadora.
- Usar un producto quitamanchas como KH7 o Cebralín antes de la lavadora. Como ya comentamos anteriormente, esta técnica que sirve para todas las camisas es muy efectiva. Asegúrate de extender el producto por todo el cuello de la camisa mediante el uso de un cepillo de dientes. Después deja reposar la prenda cinco minutos y procede su lavado en la lavadora.
- Usa vinagre blanco. Mezcla dos cucharadas de vinagre en un vaso de agua, extiende la mezcla por el cuello y déjala reposar durante al menos media hora. A continuación, enjuaga y lávala en lavadora.
Cómo decorar cuellos de camisa
Decorar el cuello de una camisa, sea cual sea, está al alcance de la mano de cualquier persona. Lo único que se necesita son estos materiales: joyas, abalorios, hilos y tijeras.
La decoración de la camisa se puede hacer de varias formas, pero lo primero es pensar el diseño en papel. ¿Vas a decorar la zona del cuello de la camisa o solo las puntas? ¿Incluirás uno o varios artilugios de decoración?
Una vez concebido el boceto hay que elegir entre coser los elementos decorativos o pegarlos. La primera opción lleva más tiempo y requiere de conocimientos básicos de costura. La segunda es más rápida pero el resultado puede ser contraproducente: algunos objetos o abalorios se pueden caer. Cualquier pegamento para tela que se venda en el mercado puede servir para este caso.
Si necesitas inspiración para decorar cuellos de camisa te recomendamos la red social Pinterest. A través de este enlace puedes conocer las ideas que proponen otros usuarios.
Los falsos cuellos de camisa
Existe una tendencia en la moda reciente para aquellos y aquellas a los que les gusten los cuellos de camisa… pero no necesariamente llevar camisas. Nos referimos a los falsos cuellos de camisa.
Se trata de complementos de moda que se utilizan por encima de otras prendas como vestidos, camisetas o jerséis dando lugar a un efecto por el cual parece que en realidad se viste una camisa.
Son habituales los de color blanco y las principales marcas de moda ya los han incluido en sus colecciones. Eso sí, no queda bien con todo tipo de prendas. Para lucirlos con elegancia hay que elegir ropa con cuello redondo y sin escote.